Modalidad de estudio a distancia implica un reto para alumnos con Asperger
El reto de las instituciones educativas para garantizar la inclusión de personas con necesidades educativas especiales, en un contexto de “virtualización” de clases, provocado por la pandemia, fue el tema que se trató este viernes en el Seminario de Discapacidad y Educación Online, que se realiza en el marco del Seminario Permanente del Instituto de Gestión del Conocimiento y del Aprendizaje en Ambientes Virtuales (IGCAAV), de UDGVirtual.
De acuerdo con el doctor Tonatiuh Lay Arellano, investigador de UDGVirtual y coordinador del Seminario, la migración de la presencialidad a un entorno virtual, en muchos casos se limitó únicamente a la digitalización de clases y de recursos informativos.
“Se ha confundido un poco la cuestión de la virtualización y la digitalización, se toma como sinónimo, pero aquí en el Sistema de Universidad Virtual, lo que hemos discutido es que a diferencia de la digitalización, la educación virtual tiene un objetivo, una metodología especializada, hay una diferencia importante”, señaló
En esta sesión del seminario, alumnos con Asperger que estudian en programas de educación superior en la modalidad presencial compartieron su experiencia y hablaron sobre los retos que han enfrentado en esta etapa de confinamiento y la consecuente implementación de la educación a distancia.
“En mis clases virtuales he tenido dificultades, por ejemplo cuando tengo dudas. En las clases presenciales puedes ir con el maestro, puedes ir con el maestro y preguntarle en específico y te lo puede explicar, pero de manera virtual pues no es así, les haces una pregunta y pueden tardar en responderte”, señaló Balam Lay, estudiante de la licenciatura en Química del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías.
De acuerdo con la maestra Jetzabel Gallardo, quien se especializa en el trabajo con jóvenes Asperger, una de las dificultades que pueden presentar las personas con dicha condición, es la comprensión de indicaciones, ya que suelen interpretarlas de manera muy literal.
“Al estar de manera virtual, el maestro puede llegar a asumir que el alumno entendió, que con enviar un correo o un video es suficiente y en ocasiones no es así. La recomendación antes era ‘acércate con el maestro y pregúntale’, pero ahora hay dificultades incluso para saber cómo contactar al maestro”, refirió.
Agregó que otro problema para las personas con Asperger, que se agrava en el trabajo a distancia, es la dificultad que tienen para organizar su tiempo y en algunos casos concentrarse en una tarea. “Tienen dificultades con las funciones operativas, parte de esas funciones es precisamente la planeación, el seguimiento de pasos, qué tengo que hacer primero y qué hacer después”.
No obstante el maestro Roberto Maciel Tejeda, experto en Ciencias del Comportamiento explicó que hay alumnos con o sin diagnóstico de Asperger, que están disfrutando las clases a distancia ya que les permite realizar otras actividades y evitar situaciones como el traslado a la escuela.
El próximo viernes tendrá lugar el Seminario de Comunicación y Cultura Digital, con el tema “Economía Digital. ¿Qué puede un bit? Datos y algoritmo como relación social”. Para participar es necesario realizar su registro en el sitio web del IGCAAV.
Número de boletín: 057
Texto y Fotografía: Karina Alatorre